Gustavo Romano / Portfolio

Composición en base a la imagen de una webcam apuntando durante las 24 horas al cielo argentino y una franja de pixeles blancos que la atraviesa.

La obra señala la particularidad de que la bandera argentina no tenía un color propiamente definido, más allá del decreto de abril de 1944 en el que se especificaba que que el matiz del azul a utilizar deberá ser un "azul claro como el cielo".

La obra estuvo en funcionamiento en mi estudio hasta que me trasladé a Madrid. Posteriormente, en 2016, fue donada al museo MACRO (Museo de Arte Contemporáneo de Rosario), Argentina (ciudad en donde está emplazado el Monumento a la bandera) desde donde transmite la actual webcam.

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